viernes, 18 de noviembre de 2011

Biografia del "P.Maximo Guisasola"


P. MÁXIMO GUISASOLA

P. Máximo Guisasola nace en Zeanuri (País Vasco) en 1.911. Se ordena como sacerdote en Vitoria en 1.935.

Pronto fue nombrado Padre Espiritual en el Seminario de Vitoria, desde donde impulsó con gran fuerza el movimiento de Misiones Diocesanas.

Al aprobarse por parte del Papa Pío XII la misión en Los Ríos, participó en la primera expedición que salió de Vitoria el 12 de Octubre de 1.948, junto con D. Víctor Garaygordovil, D. Luis Alberdi y otros misioneros.

Por nombramiento de los obispos del País Vasco, Máximo Guisasola figuraba como superior o responsable del grupo de los ocho sacerdotes que llegaron a Los Ríos, el 16 de Octubre de 1948, y de los que posteriormente vendrían.

El P. Máximo Guisasola llegó a la Provincia de Los Ríos el 16 de Octubre de 1948 y se asentó en Vinces, aunque moviéndose de un lado para otro, tratando de visitar y acompañar a todos los compañeros.

Inicialmente se ubicó en el colegio Santa Teresita de Jesús, ubicado en las calles Sucre y Bolívar, sitio que en la actualidad es propiedad del señor Alberto Kuján Chia.
Padre Máximo llega con Luís Alberti del Grupo Misionero Vasco. En este lugar lo recibe Monseñor Adolfo María Astudillo, ecuatoriano y Sergio Félix como monaguillo, que más tarde se convertirá en el acompañante del Padre Máximo.

Le gustaba el campo y se sentía muy feliz cabalgando; la alegría lo inundaba de emociones e irradiando siempre su carácter de amor y bondad. Sus amigos lo veían llegar en su caballo siempre portando obsequios que le entregaban en sus recorridos de evangelización, pues las personas le demostraban el cariño y aprecio con estos gestos.

A pesar de los inconvenientes de salud, debido a las altas fiebres intestinales, que casi siempre lo debilitaban gradualmente, nunca perdió el ánimo de trabajar por Vinces, el deseo ardiente de compartir su amor por Jesús lo llena de audacia.

Tanto así, que el 9 de agosto, inaugura solemnemente el colegio Santa Teresita del Niño Jesús, en Vinces.
Esta escuela será el medio privilegiado para anunciar a Jesucristo a los niños y jóvenes, sobre todo a los más desfavorecidos. Padre Máximo arde en deseos de anunciar a Jesucristo por doquier.
Con la ayuda de las religiosas-misioneras, dan apertura a esta institución que hasta el día de hoy se mantiene viva en los recuerdos de quienes vivieron muy de cerca el trabajo desinteresado del P. Máximo Guisasola.
Si alguien de los primeros misioneros tenía cualidad y ascendientes para aglutinar, orientar y animar a la comunidad; si alguien tenía capacidad y paciencia para entender y adaptarse a la manera de ser de la gente de Los Ríos y del Ecuador; si alguien tenía el don de gente y la habilidad natural para congraciarse con toda clase de gente…ese era el P. Máximo.

Sin embargo, el 1 de septiembre de 1.951, en un lamentable accidente de tránsito, cuando viajaba en un carro mixto de mercadería y pasajeros, desde Guayaquil hacia Vinces, un banquero repleto de gasolina en el sitio llamado “Petrillo”, colisionó con el vehículo donde él y otras personas viajaban, en la vía a Daule, quedando horriblemente calcinado, pudiendo sólo ser reconocido por un pequeño trozo de su sotana.

El P. Máximo Guisasola fue sepultado en la ciudad de Vinces, en la entrada principal de la Iglesia “San Lorenzo”, donde había tenido su residencia, y hasta el día de hoy, su tumba es visitada con fe y devoción.

La vida de P. Máximo Guisasola, la realización de su obra no son más que la corta pero tan conocida historia de su gran confianza en Jesús. Su celo de apóstol-misionero, su profundo sentido de Dios, su amor a Jesucristo y a los pobres trascienden la moda y el tiempo. Por eso este hombre extraordinario es plenamente actual, testigo para su época y para nuestro tiempo.

1 comentario:

  1. Por razón de tu breve biografía del Padre Máximo Guisasola, tento interés en contactar contigo. ¿Tienes cuenta en Facebook?

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